Leche Frita

Colocamos en un cazo 300 ml. de leche con el azúcar, la rama de canela y la cáscara de limón. Lo ponemos al fuego y dejamos hasta que empiece a hervir. Dejamos reposar para que infusione bien y después la colamos. Normalmente se utiliza leche entera pero yo siempre tengo leche desnatada que es la que uso habitualmente, y queda perfecta también, así que no hay problema en utilizar una u otra.

En otro recipiente, mezclamos el resto de la leche con la maicena y removemos bien hasta que se disuelva por completo. La mezclamos con la leche que hemos colado previamente y volvemos a ponerlo al fuego. Poned el fuego al mínimo y no paréis de removed, ya que empezará a espesar bastante rápido y así evitaremos que se nos pegue.

Cuando tenga la consistencia de una crema pastelera algo espesa, la retiramos y vertemos en un recipiente alargado. La cubrimos con papel film en contacto con la mezcla para que no se cree costra. La metemos en la nevera para que enfríe y coja la consistencia necesaria.

Con 4 horas será suficiente para que esté lista pero si la mantenemos durante toda la noche será mucho mejor.

Ponemos al fuego una sartén con aceite muy caliente. Cortamos la masa ya fría en cuadraditos más o menos todos del mismo tamaño, las pasamos por maicena y huevo y las freímos.

Ponemos al fuego una sartén con aceite muy caliente. Cortamos la masa ya fría en cuadraditos más o menos todos del mismo tamaño, las pasamos por maicena y huevo y las freímos.

Cuando las sacamos de la sartén, las colocamos en un plato con papel absorbente para que se elimine el exceso de aceite y por último las rebozamos en una mezcla de azúcar y canela.